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Tener una casa a sido; sin duda, una de las mejores inversiones que has hecho. Sabemos que has comprobado por ti mismo que te ha generado una tranquilidad única y además te ha permitido disfrutarla a tu manera. Independientemente de los cambios en el mercado, que pueden conducir a fluctuaciones de los precios, el de la vivienda siempre tiende a incrementarse, especialmente en ciudades en crecimientos como lo es el área metropolitana.

El valor de tu propiedad se basa; en principio, en factores como la ubicación, el tamaño de la casa y las características de la vivienda. Estos factores no los puedes controlar; lo que quiere decir que no lo puedes modificar, o por lo menos no fácilmente. Pero también hay otros que son de tu control y que afectan el valor de tu propiedad, entre estos tenemos: las condiciones y reformas o renovaciones que hayas realizado, estas últimas muchas veces pueden requerir una fuerte inversión.

Más allá de grandes reformas o renovaciones que requieren un gasto considerable, existen cambios pequeños que te recomendamos hacer para que aumentes el valor de tu propiedad, de forma sencilla y económica.

Bien sea que busques vender en este momento, o en un futuro, acá te dejamos algunas recomendaciones para aumentes valor de tu propiedad:

1. Resalta las ventajas de su ubicación. A la hora de ofertar tu vivienda, no solo hables de las comodidades interiores, espacios y amenidades, también subraya las rutas de transporte, vías de acceso y seguridad; además de sitios de interés cercanos, como parques, centros comerciales, universidades y colegios.

2. Prepárate para negociar. Probablemente, los interesados en comprar el inmueble pidan una rebaja u ofrezcan dinero inmediato a cambio de un descuento. Si necesitas el dinero de forma urgente, fija un tope mínimo de lo que estás dispuesto a recibir y otro monto para iniciar la negociación.

3. Realiza remodelaciones. La primera impresión es muy importante, por lo que invertir y prestar atención a cada detalle de la propiedad puede aumentar su valor, por ejemplo, una fachada recién pintada, un jardín lleno de flores, buena iluminación y herrajes nuevos.

4. Aprovecha los espacios. En el caso de que el inmueble sea pequeño, lo ideal es que a la hora de ofrecerlo esté organizado, sin objetos acumulados, con las paredes en tonos claros y gran iluminación, lo que dará la sensación de mayor amplitud.

5. Limpiar a fondo el interior. La propiedad en venta requiere una limpieza profesional profunda, que la deje libre de manchas, olores y humedades; que puedes hacer tú si gustas, pero con productos profesionales.

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